Con nuestra pareja ¿En qué momento estamos?
¿Luna de miel, llegada de hijos, criando adolescentes, a punto de ser abuelo, nido vacío? Cualquier momento es bueno para regalarnos un fin de semana para conversar sobre los dos; porque cada época trae sus expectativas, sus luchas, sus desafíos y en especial sus alegrías, para seguir a delante en este viaje o aventura que es el matrimonio.
Dos días y una noche fuera de Bogotá, en otro ambiente, un clima muy agradable y todo lo necesario para amarnos más. Cada pareja inicia su relación en formas y condiciones diferentes, algunas veces con bases frágiles que hacen tambalear la relación cuando llegan las tormentas o vientos fuertes. ¿Cómo fortalecer esas bases que nos unen más y nos llevan a dejar atrás los distintos rivales del matrimonio?
“Conversaciones profundas en mi matrimonio” es más que un tiempo para hablar; es sacarle el jugo a lo que vale para los dos, es abrir puertas a nuevas dimensiones de la conexión como pareja. Vivir juntos y comunicar nuestros pensamientos o sentimientos es más que compartir los gastos de la casa, el carro o los planes de viaje. Al involucrar ciertos elementos en nuestro diálogo se conectan nuestros corazones y se afianzan nuestros lazos de amor.